Hay estábamos las dos, penetrándonos con nuestras
miradas mientras la gente pululaba a nuestro alrededor. Ya no escuchaba el
ruido de la gente, ni de los coches, no escuchaba otra cosa que no fuera mi
propio corazón, palpitaba a 100 por hora, notaba como mi cuerpo me abandonaba y
se iba junto al de ella, olvidando donde estábamos y no pensando en lo que hacía,
solo sintiéndolo, la agarre de la cintura y con un golpe brusco la atraje hacia
mí, nuestros labios quedaron los unos sobre los otros, su cuerpo pegado al mío,
baje mis manos hacia su hermoso trasero y lo agarre con tanta fuerza que por un
momento creí correrme, la bese como si nunca hubiera tenido nada con ella, mis
dientes arrastraban su labio inferior y mi lengua degustaba su boca.
Cuando el deseo fue a mas, nos miramos y miramos
a nuestro alrededor notando como la gente se escandalizaba, no de que una
pareja se estuviera besando, no, se escandalizaba porque esa pareja estaba
compuesta por dos mujeres. Ya me he cansado de disfrazarme porque estoy en la
calle, de no poder mostrar mis sentimientos por la persona a la que amo, solo
por los perjuicios de la gente, yo no he robado, no he matado, no me rio de los
demás e intento ser respetuosa con todo el mundo, así que me importa muy poco
lo que piensen otros de mi, que piensen que soy una viciosa o una enferma, creo
que quien piensa de esa manera nunca ha sentido, ya que las personas se
enamoran de personas y no de sus sexos a no ser aquellos que estén mas pendientes
de lo que piensan los demás a lo que piensan ellos mismos.